Sensores de Aparcamiento

Qué son y cómo funcionan los sensores de aparcamiento de un coche

Qué son y cómo funcionan los sensores de aparcamiento de un coche

Objetivo

Avisar al conductor del vehículo durante una maniobra de aparcamiento de la existencia de obstáculos o peatones próximos a la parte trasera o delantera del vehículo.

Con este sistema, es posible medir el espacio disponible para aparcar y que el propio vehículo nos indique si la maniobra es posible o si el vehículo cabe en la plaza.

El vehículo tiene incluso, en el caso de los sistemas más avanzados, la posibilidad de realizar un aparcamiento asistido (aparcar solo) con la información que recibe de los sensores.

Funcionamiento

Los sensores de aparcamiento traseros se ponen en funcionamiento engranado la marcha atrás, están situados en el paragolpes trasero y gracias a estos sensores es posible determinar la distancia desde la parte de atrás de nuestro vehículo hasta el objeto. Lo mismo sucede con los delanteros, que se podrán en marcha al engranar la 1ª velocidad, funcionando a velocidades pequeñas, para detectar objetos y peatones en la parte delantera al realizar las maniobras correspondientes a aparcar o desaparcar el vehículo.

El sistema calcula con precisión la distancia que hay hasta el objeto y alerta al conductor del vehículo mediante avisos sonoros, visuales o una combinación de los dos, cuando se aproximan al objeto.

Los avisos comienzan de manera intermitente y lenta cuando el objeto se encuentra aproximadamente a un metro de distancia de nuestro vehículo y cuando es menor a unos treinta centímetros el aviso sonoro se vuelve continuo.

Componentes

  • Sensores ultrasónicos: ubicados en la parte trasera del vehículo (en algunos coches también en la parte delantera). Lo normal es disponer de cuatro sensores ultrasónicos para cada paragolpes, que cubran de una manera adecuada toda la parte trasera o delantera del vehículo.
  • Aviso acústico: se puede emplear un generador de sonidos específico o bien emplear el sistema de altavoces del propio vehículo, emitiendo en este caso el sonido por los altavoces de la zona donde se encuentra el obstáculo.
  • Display visualizador: que indica de manera gráfica dónde se encuentra el obstáculo y a qué distancia mediante un código de colores, correspondiendo al rojo la mayor proximidad.
  • Botón de desactivación del sistema: el sistema permite ser desactivado, por si no queremos hacer uso del mismo.

Colisiones evitadas

  • Colisiones contra otros vehículos u otros objetos cuando circulas a una velocidad muy baja.
  • Posibles atropellos a peatones.

Efectividad

Según un estudio del Insurance Institute for Highway Safety (IIHS), se reducen un 78% los siniestros gracias al empleo de los sensores de aparcamiento, cámara marcha atrás y sistema de frenado autónomo trasero, mientras que con los sensores de aparcamiento y cámara marcha atrás solamente, se reducen los siniestros en un 42%, en el caso de que únicamente lleven incorporados los sensores de aparcamiento se reducen un 28%.

Uso y limitaciones

Hay que tener precaución al arrancar el coche, pueden tardar unos instantes en empezar a funcionar los sensores de aparcamiento, de manera que en este periodo de tiempo el sistema no advertiría de la presencia de un objeto o persona.

En caso de nevada los sensores se pueden cubrir de nieve o barro en el caso de circular por caminos o carreteras con barro, por lo que detectarían falsamente un objeto, en ese caso es recomendable desactivar el sistema.

El sistema más común solamente avisa al conductor del vehículo, no frena. En los modelos nuevos el sistema es capaz de frenar el vehículo y así evitar una colisión o un atropello.

Coste

Los sensores de aparcamiento traseros son de serie en muchos vehículos, mientras que en vehículos de gama baja o modelos de entrada de gama, no están disponibles, en estos casos la incorporación del sistema requiere un pago adicional que para los sensores de aparcamiento traseros está alrededor de los 250 € y en el caso de contar con los sensores en la parte delantera también, su precio ronda los 700 €.

Obligatoriedad

La detección de obstáculos en maniobra de marcha atrás es obligatoria en julio de 2022 para nuevas homologaciones y en julio de 2024 para nuevas matriculaciones.